lunes, 11 de marzo de 2013

¿Dudará la felicidad?


Dicen que soy muy buena para las ilusiones. Yo les respondo: No siempre. Solo me ilusiono de personas que valen la pena ilusionarse. Esa persona eres tu. Nada está claro. Nadie sabe lo que tu quieres aún. Nadie mas que tu. Por mi parte, siempre confundida y loca, sobre todo loca, por ti.
Mayormente las personas hoy en día quieren olvidar el pasado, incluyéndome. Pero ese día, fue el día. Además de verte por segunda vez, fue la primera vez que te besé, que nos besamos. Después de años, no había disfrutado y sentido tanto un beso como aquella noche, donde me agarrabas por la cintura y yo inclinándome, llegando a tu boca, besándote rodee mis brazos entre tu cuello, sintiendo como si fueras mio solo con un beso.
Acto seguido, junto a ti sobre tu cama, tus brazos estrechándome y tocando mi cintura a la vez. Besos incontables, caricias indefinidas y frases como "me encantas" "me encantan tus besos" fueron inesperadas e importantes para sellar lo bueno de esa noche.